Aunque me vuelva tan rico como Creso, el rey Midas, los Rockfeller, H. Hughes y Bill Gates combinados, y no tengo AMOR, nada soy.
Aunque me haga tan poderoso como Nabucodonosor, Alejandro el Grande, Carlomagno y Napoleón Bonaparte juntamente, y no tengo AMOR, nada soy.
Aunque posea la elocuencia de Demóstenes, Cicerón, Shakespeare y Churchill, de manera que cautive multitudes, y no tengo AMOR, nada soy.
Aunque tenga la belleza y encanto de Elena de Troya, Cleopatra, y Miss Universo, si no tengo AMOR, nada soy.
¡EL AMOR ÁGAPE NUNCA FALLA!
Aunque haya riqueza, se descompondrá y arruinará.
Aunque haya fama, se sumirá en el olvido.
Aunque haya poder y supremacía política, se reventará como una burbuja.
Aunque haya poder militar, se deshará en migajas.
Aunque haya voces elocuentes, éstas se acallarán.
Aunque haya belleza de cara y forma, se desvanecerá.
PERO EL AMOR ES PARA SIEMPRE.
Cuando no haya más tiempo,
Cuando los reinos y altas posiciones del mundo caigan,
Cuando la ancianidad de los días se presente ante Su silla de juicio,
Cuando se dejen de escuchar las arpas angelicales y el silencio de los cielos llene el Universo,
EL AMOR TODAVÍA SERÁ JOVEN.
Cuando el último avión haya hecho su viaje,
El último satélite haya circulado el globo,
Y el último cohete haya sido lanzado;
Cuando los despojos del cosmos derretido sean esparcidos por la violencia de la ira de Dios;
Cuando el nuevo cielo y la nueva tierra broten de la matriz de las edades,
EL AMOR TODAVÍA ESTARÁ EN SU INFANCIA.
Nunca envejecerá.
Nunca se desvanecerá.
Nunca se descompondrá.
Es el máximo objetivo de la vida.
Es divino, por lo tanto...
ASEGÚRESE QUE EL BLANCO DE SU VIDA SEA EL AMOR.
viernes, 22 de abril de 2011
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