lunes, 14 de septiembre de 2009

Soy un soldado (autor desconocido)

Soy un soldado en la armada de Dios. El Señor Jesucristo es mi Comandante en Jefe. La Santa Biblia es mi código de conducta. Fe, oración y la Palabra de Dios son mis armas de Guerra. He sido enseñado por el Espíritu Santo, entrenado por la experiencia, probado en la adversidad, refinado por fuego. Soy un voluntario en su armada y estoy enlistado para la eternidad. Seré, retirado de la armada, o moriré en esta armada. Pero, no saldré de ella, no me venderé, no traicionaré, ni seré presionado. Soy leal, confiable, capaz y dependiente. Si mi Dios me necesita, estaré ahí.
Soy un soldado. no un bebé. No necesito ser consentido, mimado, alimentado, reconocido o alentado. Soy un soldado. Nadie tiene que llamarme, recordarme, escribirme, visitarme, lisonjearme o tentarme. Soy un soldado, no un cobarde. Estoy en mi puesto, saludando a mi Rey, obedeciendo Sus órdenes,exaltando Su nombre y construyendo Su Reino. Nadie tiene que enviarme flores, regalos, comida, tarjetas o donaciones. No necesito ser acurrucado, mecido, atendido o satisfecho. Estoy comprometido. Mis emociones no pueden ser tan dañadas como para hacerme volver atrás.
No puedo ser lo suficientemente desalentado como para hacerme a un lado. No hay pérdida suficiente para hacerme huir. Cuando Jesús me llamó a su Armada, yo no tenía nada. Si termino con nada, saldré como entré, pero siempre ganando. Mi Dios suplirá todas mis necesidades.
Soy más que vencedor, siempre triunfaré. Puedo hacer todas las cosas a través de Cristo. El diablo no puede vencerme. La gente no puede desilusionarme. El clima no puede fatigarme. La enfermedad no puede detenerme. Las batallas no me pueden atenuar. El dinero no puede comprarme. Los gobiernos no pueden silenciarme y el infierno no puede agarrarme. Soy un soldado y ni la muerte podrá destruirme.
Para cuando mi Comandante me llame desde este campo de batalla, Él me promoverá a capitán. Soy un soldado en la Armada, estoy marchando, proclamando la victoria. No me rendiré, no volveré atrás. Soy un soldado marchando a mi destino, el Cielo hacia Cristo Jesús.

Y tú ¿qué eres? ¿Un soldado de Jesucristo, o un "dandy" de este mundo?

1 comentario: